Enamorarme la primera vez fue mi error
Deslenguada, impertinente y maleducada. Así es como David Wyatt ve a Eve Montés, la chica que sin proponérselo entró en su tranquilo y ordenado mundo para ponerlo patas arriba. Pero lo que él no sabe es que detrás de todo ese carácter existe una mujer frágil y luchadora. Bestia peluda, gruñón y malhumorado, es como lo describe ella, sin siquiera imaginarse que debajo de esa fachada de Neanderthal, se esconde un hombre noble, responsable y de buenos sentimientos. Quien pronto se convertirá en su amigo, protector, cocinero y hasta enfermero. En un todo para ella. A Eve, un duro golpe ...