El pingüino que quería saber

An iguana named Bemberecua lived near the village of Tlacotalpan by the Papaloapan river, where life was very tranquil, but when Bemberecua heard the marvelous music of the fandango, she discovered that she loved to dance more than anything else in the world, even though her claws kept destroying the villager's dance floor where Bemberecua secretly danced each night.

This charming story presents a new way for young children to understand how to creatively embrace who they are, no matter what others think. Carla's lunch box is filled with odd delights like the Olive, Pickle, and Green Bean Sandwich; the Banana–Cottage Cheese Delight; and the unforgettable Chopped Liver, Potato Chips, and Cucumber Combo. To Carla, these are delicious and creative lunches, but her teasing classmates are unconvinced, abandoning her at the lunch table to eat her bizarre sandwiches alone. The tables turn, however, when Buster—the worst tease of all—forgets his lunch and...

Es un cuento de hadas sobre una niña llamada Alicia, que fue traída a un país de hadas por un huracán. Allí vivían buenos elfos, luciérnagas y gnomos. Pero extrañaba mucho a sus padres y soñaba con regresar a casa.

Había una vez un chico al que llamaban Domingo Faustino. Dicen que nunca faltó a clase ni siquiera cuando llovía. ¡Qué gracia! En San Juan, donde nació, nunca llueve en época de clases. En estos cuentos, Sarmiento no es un prócer. Es un chico. Un chico con un papá y una mamá, un chico que juega a los soldaditos, que tiene miedos y sueños. Un chico como vos.