La humanidad velada

¡Sumérgete en un apasionante mundo de aventuras a través de la lectura! Estos cautivadores cuentos, de manera amena y entretenida, enseñan cómo la ciencia se hace presente en muchas situaciones cotidianas. Cada relato te llevará a través de las vidas de personajes únicos y entrañables, desde amigos y familiares, pasando por un malhumorado pirata, hasta planetas por descubrir. Una obra para estimular la imaginación de los más pequeños y ayudarlos a entender y resolver los desafíos del día a día. Una experiencia lectora emocionante y educativa.

Cuando tienes el coraz&ón roto, el mejor lugar para sanarlo es junto a los tuyos. As&í lo cree Angie, que ha dejado atr&ás un matrimonio roto, un trabajo brillante y, sobre todo, el fracaso de una maternidad que no ha podido ser y que pesa como una losa sobre su esp&íritu. El cari&ño de su madre y sus hermanas y el trabajo en el restaurante familiar son b&álsamo para su alma, y Angie comienza a aceptar que hay otras cosas en la vida adem&ás de la de ser madre, e incluso piensa en recuperar a su marido, Conlan. Pero el destino tiene sus propios planes, y cruza en su camino a Lauren, una ...

Este libro no es un ensayo filosófico sobre el deporte en general, ni un estudio técnico de ningún deporte en particular. Es una miscelánea de crónicas deportivas, de recuerdos personales y de emociones que millones de personas han podido sentir de forma parecida en los espectáculos deportivos. Se trata de textos que no solo hablan sobre fútbol, aunque el fútbol sea predominante, sino que lo hacen también sobre baloncesto, rugby, tenis, vela, golf, motor, boxeo, balonmano, hockey, atletismo, natación, carreras de caballos, ciclismo, etc. Un cóctel deportivo que espero y deseo que...

La búsqueda de su madre biológica llevó a Diana Reeves al pueblo francés de Bellevue-sur-Lac, donde acabó trabajando para Anton, el atractivo conde de Valois.Anton no confiaba en la recién llegada, por lo que decidió vigilarla de cerca. Pero Diana no tardó en hacerse un hueco en su corazón... y en su cama. Cuando la pasión acabó en embarazo, Anton insistió en que Diana debía casarse con él. Fue entonces cuando ella descubrió cuánto deseaba él tener un hijo y empezó a cuestionarse los motivos por los que quería casarse con ella...