Dominio de la Inteligencia Emocional

Con un lenguaje sencillo imantado de moralejas que invitan a renovarse, este libro pretende dar una guía de cómo vivir mejor consigo mismo, independientemente de las circunstancias. Se pretende orientar al lector hacia una vida con más fé en sí mismo, fé en Dios y en todo lo bueno que la vida nos ofrece. Se busca contribuir a mejorar el presente, cambiando la visión que se tiene de la vida. Entendiendo que lo más importante no son las co¬sas en sí, sino cómo uno las ve, cómo nos afectan en el día a día. Lo importante no es lo que otros dicen o sienten, sino lo que uno cree,...

Este es un libro con un mensaje poderoso...EL PODER DE ELEGIR. Muchas personas no llegan a tener exito durante los mejores tiempos porque han fracasado en utilizar ESTE PODER EXTRAORDINARIO, EL PODER DE ELEGIR. Otras personas aplicaran ESTE PODER EXTRAORDINARIO, EL PODER DE ELEGIR, y seran exitosas aun en los tiempos malos porque ellos no dejan que la adversidad los detenga. Ellos continuaran hasta alcanzar el exito. Disfrute mayor felicidad Fortalezca su personalidad Domine las condiciones que afectan su vida Con solo treinta minutos diarios de lectura de este clasico inspirador usted puede...

¿Cuándo se dilatan nuestras pupilas?, ¿qué significa que alguien se lleve las manos al cuello?, ¿qué indicamos al ladear la cabeza?, ¿y cuando nuestros pies se mueven inquietos o se orientan hacia la puerta? Los gestos son nuestro sistema de comunicación más primitivo y universal. Revelan información, logran que identifiquemos las emociones de quienes nos rodean y que podamos anticipar comportamientos. Su componente innato y automático convierte a lo no verbal en un lenguaje significativo, veraz y menos manipulable que la palabra. Estas páginas nos permiten conectar con nuestra...

La sociedad nos ha enseñado que las emociones deben contenerse bajo una rigurosa postura en la cual los sentimientos no pueden expresarse libremente. Al parecer, desconocemos la manera de integrar las emociones a nuestra vida conscientemente. Nuestro comportamiento se rige bajo premisas culturales que obligan a reservar las emociones para nuestra privacidad, como si al desatarlas o expresarlas libremente te rebajaran al punto de parecer una persona de mal gusto o débil. Esto es, sin lugar a dudas, una carencia total de inteligencia afectiva: la libertad de manifestar lo que sentimos...