John Ruskin (1819-1900) fue un influyente crítico de arte, escritor y pensador social británico, cuyas ideas sobre el arte, la arquitectura y la economía tuvieron un impacto duradero en el pensamiento victoriano y más allá. Nacido en Londres, Ruskin fue el único hijo de un comerciante de vinos y una madre talentosa en el arte. Desde joven, mostró un gran interés por la pintura y la literatura, lo que lo llevó a estudiar en la Universidad de Oxford, donde se graduó con honores en 1842.
Ruskin se destacó principalmente como crítico de arte, convirtiéndose en una figura clave en el movimiento del pre-rafaelismo, que abogó por un regreso a la sinceridad y la belleza de la pintura antes de Rafael. Su obra más conocida, The Stones of Venice (Las piedras de Venecia), publicada entre 1851 y 1853, no solo analizó la arquitectura de la ciudad, sino que también exploró la conexión entre arte y moralidad. En esta obra, Ruskin argumenta que la calidad del arte refleja la salud de una sociedad y sus valores morales.
Además de su crítica de arte, Ruskin también se interesó en cuestiones sociales y económicas, escribiendo sobre la industrialización y sus efectos nocivos en la sociedad. En su obra Unto This Last (1860), criticó el capitalismo industrial y abogó por una economía centrada en el bienestar del ser humano. Esta publicación influyó en muchos de sus contemporáneos y es considerada una de las primeras críticas del capitalismo moderno.
Como educador, Ruskin propuso nuevas formas de enseñanza que integraban la apreciación del arte y la naturaleza. Fundó la Ruskin School of Drawing and Fine Art en Oxford, que se convirtió en un centro importante para la educación artística. También promovió la conservación del patrimonio arquitectónico y natural, siendo un precursor del movimiento por la preservación que se desarrolló más tarde en el siglo XX.
La vida personal de Ruskin estuvo marcada por la tristeza y la complejidad. Se casó con Effie Gray en 1848, pero su matrimonio fue problemático y se anularía en 1854. Se ha especulado que su incapacidad para consumar el matrimonio pudo haber sido un factor clave en su separación. A pesar de su tumultuosa vida personal, Ruskin continuó produciendo obras significativas a lo largo de su vida, siendo un prolífico escritor que dejó un legado de más de 250 obras.
A lo largo de su vida, Ruskin recibió numerosos honores, incluidos títulos honorarios y el reconocimiento por su contribución al arte y la crítica. Sin embargo, durante sus últimos años, sufrió problemas de salud mental y se retiró en gran medida de la vida pública. A pesar de esto, su influencia perduró, y su legado sigue siendo relevante en debates sobre el arte, la economía y la ética.
John Ruskin falleció el 20 de enero de 1900 en Brantwood, su hogar en el Lake District. Su obra y sus ideas continúan inspirando a generaciones de artistas, arquitectos y pensadores, reafirmando su lugar como una de las figuras más importantes del pensamiento victoriano.